Cómo mejorar la estrategia de relaciones públicas de S.M Felipe VI
Cómo mejorar la estrategia de relaciones públicas de S.M Felipe VI
2020 ha sido un año difícil para el Reino de
España. La Pandemia del Covid-19 ha cobrado la vida de miles de
ciudadanos inocentes, y la Casa Real de S.M el Rey, ha vivido
difíciles episodios de controversias institucionales, a raíz de las
investigaciones que se están llevando a cabo sobre una cantidad de
acciones cometidas por el Rey Emérito, Juan Carlos I.
Para contrarrestar la crisis económica y social
que vive España a causa del coronavirus, y para mejorar la imagen
institucional de la Casa Real, como institución fundamental de la
estructura política de la Monarquía Parlamentaria que posee España,
S.M el Rey ha liderado un amplio y fuerte calendario de actividades
públicas, alrededor de toda España, desde el fin del confinamiento.
S.M Felipe VI, como Jefe de Estado, ha recorrido
todas las Comunidades Autónomas que conforman España con dos
objetivos:
2020 ha sido un año difícil para el Reino de España. La Pandemia del Covid-19 ha cobrado la vida de miles de ciudadanos inocentes, y la Casa Real de S.M el Rey, ha vivido difíciles episodios de controversias institucionales, a raíz de las investigaciones que se están llevando a cabo sobre una cantidad de acciones cometidas por el Rey Emérito, Juan Carlos I.
Para contrarrestar la crisis económica y social que vive España a causa del coronavirus, y para mejorar la imagen institucional de la Casa Real, como institución fundamental de la estructura política de la Monarquía Parlamentaria que posee España, S.M el Rey ha liderado un amplio y fuerte calendario de actividades públicas, alrededor de toda España, desde el fin del confinamiento.
S.M Felipe VI, como Jefe de Estado, ha recorrido todas las Comunidades Autónomas que conforman España con dos objetivos:
- Subir la moral de la población dentro de la lucha colectiva por superar los problemas causados por el Covid-19.
- Levantar la imagen pública de la Casa Real.
S.M Felipe VI y la Reina Letizia en Sevilla.(Imagen cortesía de La Vanguardia) El Rey, como figura pública y de Estado, tiene el
derecho y el deber de compartir con los diferentes grupos sociales e
instituciones -públicas y privadas- que integran España.
Desde mediados de junio, la actividad real se ha
centrado principalmente en:
-
Visitar dos o tres ciudades de cada
Comunidad Autónoma.
-
Explorar las actividades de instituciones
públicas y privadas como grandes empresas, templos y centros de
apoyo a ciudadanos con discapcidad.
-
Encuentro con grupos empresariales y
artísticos.
-
Encuentros con adultos mayores.
La gira de S.M Felipe VI ha sido, en términos
generales, bien recibida por los ciudadanos españoles. No obstante,
las actividades públicas del Rey tienen espacio para mejorar y para
ser más eficientes en el logro de sus dos objetivos.
A continuación, presento algunas recomendaciones
para mejorar las estrategias de relaciones públicas de S.M Felipe
VI, y de la Casa Real.
Diversificar el tipo de instituciones
España está compuesta por un tejido
institucional público y privado muy diverso. Dentro de sus fronteras
se encuentras miles de organizaciones de diferente índole: Compañías
de distribución, startups de tecnología e IoT, cadenas de hoteles,
centros de asistencia salud pública especializada, organismos de
apoyo social a las minorías, entre otros.
El tipo de organizaciones que ha visitado S.M el
Rey desdde junio ha variado poco. Sí, ha tenido diversidad, pero muy
poca. Si se persiste el recorrido por instituciones similares, se
pierde la posibilidad de atender otros rubros del tejido social y
empresarial de España, así como la oportunidad de ofrecer apoyo a
diferentes colectivos sociales. Igualmente, la Casa Real corre el
riesgo de convertir sus recorridos en visitas monótonas y poco
impactantes.
Los Reyes Felipe VI y Letizia en el Monasterio de Santa María de Poblet.(Foto cortesía de ABC.)
Ampliar el discurso
S.M Felipe VI posee una sólida y especial
formación institucional y militar. No cabe dudas de que es una
persona preparada para ejercer como figura de Estado. No obstante,
sus recorridos no ofrecen, en el grado que deberían, la posibilidad
de comunicar con mayor relevancia sus mensajes sobre el futuro de
España y la prosperidad de sus ciudadanos.
Las palabras de aliento y reflexiones del Rey son
bien recibidas por los ciudadanos, y por los medios de comunicación
que, a modo de altavoz, sirven para extender su mensaje alrededor de
todo el País, más allá de los oídos de los asistentes a uno de
los actos de S.M.
Dentro del calendario de actividades públicas de
la Casa Real, queda espacio para ofrecer nuevas oportunidades
comunicativas a todos los miembros de la familia monárquica. Como
sugerencia final para este apartado, recomiendo estudiar con detalle
la línea que separa los discursos bien recibidos al cansancio del
oyente.
Ampliar las actividades de calle
El encuentro de S.M el Rey con los ciudadanos se
ha llevado a cabo bajo serias restricciones de higiene, necesarias
para los tiempos del Covid-19, la llamada nueva normalidad.
Sin embargo, los encuentros de la Casa Real con
los ciudadanos, fuera de una visita a determinada institución,
pueden y necesitan acrecentarse.
Con la investigación sobre el Rey Emérito, Juan
Carlos I, sacudiendo los cimientos de la institución monárquica.
S.M Felipe VI necesita estrechar los vínculos con el ciudadano que
puede asistir a un acto público de la Casa Real.
Replantear las actividades en
Cataluña
Cataluña es una región delicada para el Rey, a
causa de los movimientos independentistas de la última década. Su
última visita a la Comunidad Autónoma, se realizó bajo una sombra
de secretismo que, lejos de beneficiar la imagen pública de la Casa
Real, logra lo contrario.
Las actividades en Cataluña necesitan plantearse
sobre términos diferentes a los que definieron la última actividad.
S.M Felipe VI ostenta la Jefatura del Estado español y, así como
posee detractores en Cataluña, también tiene partidarios que
anhelan compartir en actos públicos con la Casa Real.
Las recomendaciones anteriores tienen como
finalidad aportar sugerencias constructivas al Equipo de Relaciones
Públicas de la Casa Real de S.M el Rey Felipe VI.
El presente artículo se ha elaborado bajo la
mirada del marketing político y las relaciones públicas. Espero que
el mismo sea de utilidad para todos los miembros de ambos sectores.
Michael J. Maza.
Director Ejecutivo de Retro Marketing.
- S.M Felipe VI y la Reina Letizia en Sevilla.(Imagen cortesía de La Vanguardia)El Rey, como figura pública y de Estado, tiene el derecho y el deber de compartir con los diferentes grupos sociales e instituciones -públicas y privadas- que integran España.
Desde mediados de junio, la actividad real se ha centrado principalmente en:
-
Visitar dos o tres ciudades de cada Comunidad Autónoma.
-
Explorar las actividades de instituciones públicas y privadas como grandes empresas, templos y centros de apoyo a ciudadanos con discapcidad.
-
Encuentro con grupos empresariales y artísticos.
-
Encuentros con adultos mayores.
La gira de S.M Felipe VI ha sido, en términos generales, bien recibida por los ciudadanos españoles. No obstante, las actividades públicas del Rey tienen espacio para mejorar y para ser más eficientes en el logro de sus dos objetivos.A continuación, presento algunas recomendaciones para mejorar las estrategias de relaciones públicas de S.M Felipe VI, y de la Casa Real.
Diversificar el tipo de instituciones
España está compuesta por un tejido institucional público y privado muy diverso. Dentro de sus fronteras se encuentras miles de organizaciones de diferente índole: Compañías de distribución, startups de tecnología e IoT, cadenas de hoteles, centros de asistencia salud pública especializada, organismos de apoyo social a las minorías, entre otros.
El tipo de organizaciones que ha visitado S.M el Rey desdde junio ha variado poco. Sí, ha tenido diversidad, pero muy poca. Si se persiste el recorrido por instituciones similares, se pierde la posibilidad de atender otros rubros del tejido social y empresarial de España, así como la oportunidad de ofrecer apoyo a diferentes colectivos sociales. Igualmente, la Casa Real corre el riesgo de convertir sus recorridos en visitas monótonas y poco impactantes.
Los Reyes Felipe VI y Letizia en el Monasterio de Santa María de Poblet.(Foto cortesía de ABC.)Ampliar el discurso
S.M Felipe VI posee una sólida y especial formación institucional y militar. No cabe dudas de que es una persona preparada para ejercer como figura de Estado. No obstante, sus recorridos no ofrecen, en el grado que deberían, la posibilidad de comunicar con mayor relevancia sus mensajes sobre el futuro de España y la prosperidad de sus ciudadanos.
Las palabras de aliento y reflexiones del Rey son bien recibidas por los ciudadanos, y por los medios de comunicación que, a modo de altavoz, sirven para extender su mensaje alrededor de todo el País, más allá de los oídos de los asistentes a uno de los actos de S.M.
Dentro del calendario de actividades públicas de la Casa Real, queda espacio para ofrecer nuevas oportunidades comunicativas a todos los miembros de la familia monárquica. Como sugerencia final para este apartado, recomiendo estudiar con detalle la línea que separa los discursos bien recibidos al cansancio del oyente.
Ampliar las actividades de calle
El encuentro de S.M el Rey con los ciudadanos se ha llevado a cabo bajo serias restricciones de higiene, necesarias para los tiempos del Covid-19, la llamada nueva normalidad.
Sin embargo, los encuentros de la Casa Real con los ciudadanos, fuera de una visita a determinada institución, pueden y necesitan acrecentarse.
Con la investigación sobre el Rey Emérito, Juan Carlos I, sacudiendo los cimientos de la institución monárquica. S.M Felipe VI necesita estrechar los vínculos con el ciudadano que puede asistir a un acto público de la Casa Real.
Replantear las actividades en Cataluña
Cataluña es una región delicada para el Rey, a causa de los movimientos independentistas de la última década. Su última visita a la Comunidad Autónoma, se realizó bajo una sombra de secretismo que, lejos de beneficiar la imagen pública de la Casa Real, logra lo contrario.
Las actividades en Cataluña necesitan plantearse sobre términos diferentes a los que definieron la última actividad. S.M Felipe VI ostenta la Jefatura del Estado español y, así como posee detractores en Cataluña, también tiene partidarios que anhelan compartir en actos públicos con la Casa Real.
Las recomendaciones anteriores tienen como finalidad aportar sugerencias constructivas al Equipo de Relaciones Públicas de la Casa Real de S.M el Rey Felipe VI.
El presente artículo se ha elaborado bajo la mirada del marketing político y las relaciones públicas. Espero que el mismo sea de utilidad para todos los miembros de ambos sectores.
Michael J. Maza.
Director Ejecutivo de Retro Marketing.
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