Sadfishing: una emergencia que requiere de soluciones inmediatas

 

 

Sadfishing: una emergencia que requiere de soluciones inmediatas

 

Durante 2019 se ha propagado una nueva modalidad utilizada por influencers y estrellas de las redes sociales para captar la atención de las masas: el uso de afirmaciones exageradas sobre problemas emocionales propios.

Los vídeos cortos de comedia, las fotos en yates, discotecas y hoteles han dado paso a publicaciones con mensajes bastante breves sobre depresión, angustia, soledad e inseguridad. La meta es aumentar su base de seguidores y número de likes, apelando a un lado más humano y emocional. Dicha táctica publicitaria ha sido bautizada como sadfishing.

El uso exagerado de la vulnerabilidad como mecanismo de mercadeo ha saturado las redes sociales de personas que de un día para otro cambiaron radicalmente su contenido, sustituyendo la manifestación de una vida de lujos y abundancia por otra más simple, orientada a comunicar sentimientos de pesar.

Cientos de influencer han sido acusados de utilizar un falso discurso para ganar el afecto de las personas. La mayoría no le ha dado importancia a las críticas, y han decidido ignorar el verdadero problema que su acción está causando: la manera cómo su falso testimonio afecta a millones de jóvenes y adolescentes que sí padecen problemas emocionales.

Una gran cantidad de niños y adolescentes que padecen problemas de depresión, ira, soledad u otro problema emocional similar, ha compartido se genuina vulnerabilidad en redes sociales, tratando de obtener el mismo apoyo que recibió su influencer favorito. El problema está en que, al estar la cultura 2.0 saturada de sadfishing, muchos se apresuran a acusar al joven de mentir y de tratar llamar la atención. En muchos casos las acusaciones de mentiroso se convierten en intensos episodios de bullying, el cual profundiza los problemas del niño.

Un reconocido estudio realizado por la agencia Digital Awareness UK descubrió que jóvenes con una genuina necesidad de apoyo emocional profundizan sus problemas al no recibir el apoyo esperado en redes sociales, o al ser acusados de intentar llamar la atención.

Como Ciudadanos Con Iniciativa, debemos condenar el uso del sadfishing como herramienta publicitaria. Existe una amplia variedad de herramientas de marketing para promocionar una marca o producto, no hace falta fingir un problema emocional para darse a conocer. Al contrario, al aplaudir éste tipo de práctica, evitamos que quienes necesitan ayuda reciban el soporte que merecen.

Igualmente, corresponde a cada Ciudadano Con Iniciativa el promover que, antes de condenar, averigüemos si el testimonio de una persona sobre sus episodios depresivos es real. No debemos alentar una cacería de brujas contra un adolescente que busca una mano amiga. Sé que no es fácil descubrir cuando alguien está mintiendo, pero muchas veces la mentira llega a ser bastante obvia.

Hágase un Ciudadano Con Iniciativa y utilice las redes sociales de manera responsable. ¡Yo creo en usted!

Michael J. Maza

 

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