Consejos para prevenir el trastorno Hikikomori

Consejos para prevenir el trastorno Hikikomori 

Lo que inicialmente se creyó como un trastorno que afectaba únicamente a la juventud japonesa, se ha expandido a otros países, como Corea del Sur, Estados Unidos y España.

El síndrome Hikikomori, que muchos consideraron un simple rumor, un concepto de moda, se ha convertido en una seria amenaza para adolescentes y jóvenes adultos del mundo entero, en especial para aquellos que viven en sociedades que son vanguardia en el uso de la tecnología.

Encuestas recientes demuestran que nada más en Japón cerca de medio millón de personas padecen de éste trastorno psicológico, y en la vecina Corea del Sur, el problema se ha ido propagando hasta afectar a alrededor de cuarenta mil adolescentes.

Qué significa Hikikomori

El concepto Hikikomori refiere a la particular combinación de aislamiento físico, social y emocional en los que se recluye un adolescente, junto con el uso excesivo de aparatos electrónicos como portátiles y videojuegos.

El término fue creado por el psicólogo japonés Tamaki Saito en su libro Aislamiento Social: una interminable adolescencia, publicado en el año 1998.

Quien lo padece (normalmente jóvenes entre los 14 y 25 años) vive en un alto grado de asilamiento, de reclusión en 4 paredes, donde evade interactuar con padres, amigos, y sociedad en general.

Normalmente, las personas padecen de estrés y ansiedad, producto de la presión social; no obstante, para un hikikomori la presión es imposible de soportar, así que recurre a una salida extrema: evitar contacto con otras personas.

Cómo identificar si tu hijo se ha convertido en un Hikikomori

El aislamiento extremo no ocurre de un día para otro, sucede paso a paso, a través de un proceso continuo.

Por regla general, un hikikomori va disminuyendo el tiempo que pasa en la calle, deja de frecuentar a sus amigos, de participar en actividades familiares, y comienza a pasar mucho tiempo en su habitación, a solas.

El cuarto se convierte en su único compañero. Que no te extrañe si su dormitorio se llena de basura, como envoltorios de comida rápida, y si las horas de sueño de tu hijo se descontrolan.

La excesiva soledad causa graves estragos los seres humanos. Mucho tiempo a solas y pierdes la capacidad para intercambiar más de dos palabras con conocidos y extraños. El miedo y las inseguridades se acrecientan, y se convierten en una avalancha imposible de controlar. Todo esto le ocurre a un Hikikomori con el transcurso de las semanas. 

Aunque el uso excesivo de la televisión, el computador y los video juegos no aparecen en todos los casos del trastorno Hikikomori, sí están ligados a la mayoría, puesto que, en casos de confinamiento extremo, los equipos electrónicos se transforman en el único medio de entretenimiento.

Mejor prevenir que lamentar 

Si tu hijo comienza a aislarse cada día más, y a pasar mayor cantidad de tiempo encerrado a solas en su cuarto, no te preocupes; existen algunas cosas que puedes hacer para prevenir que una depresión o un momento de inseguridad se convierta en un problema mayor. Como por ejemplo:

• Inscribe a tu hijo en actividades recreacionales

Una excelente forma de prevenir el problema Hikikomori es inscribiendo a tu hijo/a en actividades educativas, recreacionales o deportivas que requieran trabajo en equipo, especialmente al aire libre. Un club de fútbol, de ajedrez o una academia de baile son excelentes lugares que no sólo promueve la inclusión social, sino que también fomentan la salud de quienes lo practican.

•        Inclúyelo en los planes familiares

¿Se quieren tomar unas pequeñas vacaciones o un fin de semana en familia? Entonces incluye a tu adolescente o joven adulto en el proceso de planificación. Tal vez haya un sitio del que tenga mucho tiempo deseando ir. Si tiene varios días o semanas sin salir, no dejes que se quede en casa.

• Dale su espacio

Una persona de quince años necesita tanto espacio como una de veinticinco. Si tu hijo/a tiene unos pocos días sin salir, tal vez esté cansado, o anhele un poco de tiempo para sí mismo. No trates de invadir cada segundo de su día, él/ella también merece un espacio para estar a solas, para ordenar sus pensamientos, o para disfrutar de su propia compañía.

• Regula el uso de internet y aparatos electrónicos

Los videojuegos e internet son excelentes herramientas de entretenimiento y comunicación, pero como todo, si se usa en exceso es dañino para la salud. Una consola jamás será sustituta para un amigo, ni FIFA será sustituto para una tarde de fútbol al aire libre. Por ello, es importante que lleves un control de cuánto tiempo pasa tu hijo/a frente al monitor del pc o del televisor. No se trata de prohibírselo por completo, sino de constatar que no está haciendo uso excesivo de ellos.

Si el grado de aislamiento que padece tu hijo ha alcanzado niveles alarmantes, lo recomendable es solicitar de inmediato la asesoría de un psicólogo experto. Poco a poco se han ido inaugurando centros de asistencia para estos casos. Allí podrás encontrar muchísima información, pero con lo que has leído el día de hoy, ya tienes las bases para prevenir un problema que puede acabar con la vida social de tus hijos, y por ende acabar con su futuro.

Michael J. Maza

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